Una apuesta recíproca

Miré hacía atrás para abrir unos silencios
de las miradas caídas por la cornisa
con las puntas de los dedos a la deriva
solo queda esperar algo tenue
al acariciar tu pelo, aquel frío veneno.
Suaves trazos dibujados por mi piel para escapar 
y ser estrella de otra constelación.
Detuviste las horas en un tibio adiós
y tu cuerpo de mis sábanas desapareció.

Photo by Jon Tyson on Unsplash

Comentarios

Entradas populares