Y sostener el mundo en un simple suspiro

Mi corazón acaba con una foto en blanco y negro
ahora que tu destino y el mío han pasado de largo
quizás las esperanzas serán perfume de refugios irreales
sin saberse siquiera en la misma ciudad.
Esperándote en el vacío de los sueños
a veces vuelvo al origen de todos mis miedos
que no son más que los restos de tus dedos en la oscuridad
así opaques a la luna siendo como eres: sin piedad

Si mis manos se quemaron después de tocarte
la voz se perdió en forma de bruma en tus labios
como Dios se perdió en las madrugadas
entre miles de pasajeros donde me abandonaste
como una mancha sin efecto, un final sin cuento

sin la emboscada de tus besos no me entiendo
y sin la nostalgia de tu imagen me siento sin dueño
apenas con un simple suspiro sostengo el mundo entero.

Quién eres, canción eterna, viento lento, nube de paso en cama?
En mis parpados lejanos están aquellos días
de dejarnos sin aliento para al final venir a recordarnos
nuestros cuerpos aún unidos en un vaivén de jadeos
pero ajenos en el último recoveco de los sentimientos
siento en partes entre lo soñado, lo vivido y aún no comprendo.